Confío en la buena relación con el gobierno del Estado y la LXIV Legislatura, pero también de la intervención a nivel nacional para que respalden su presupuesto
Isabel Polvo Escobar
El rector la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT), Luis Armando González Plasencia, informó que para solventar los gastos de la máxima casa de estudios requiere de 60 millones de pesos para el 2022, por lo que confió en que el presupuesto que solicite sea respaldado y favorable.
“Requeriríamos unos 60 millones pesos más, es lo que recolectamos como recursos propios en la universidad, los presupuestos federal y estatal están alrededor de los 800 mil pesos que se van prácticamente en salarios y muy poco en el gasto corriente”, dijo.
Recordó que desde que comenzó el gobierno federal la discusión del presupuesto se enmarcó de carácter mucho más amplía que se da a nivel nacional en el contexto de las nuevas exigencias del artículo tercero constitucional particularmente en materia de gratuidad.
Adelantó que el presupuesto que ha solicitado en anteriores gobiernos estatales, siempre tiene que ver con la necesidad de solventar los gastos que tiene la universidad, tanto en el presupuesto federal como estatal son etiquetados y básicamente sirven para pagar salarios, servicios luz agua, gas y en muy poca medida para operar.
González Plasencia también refirió que “en realidad todo el período que se ha dado en la mano neoliberal se caracterizó por trasladar los costos de la educación a las y los jóvenes” por eso las universidades han tenido que cobrar cuotas, no obstante ahora la discusión nacional se enmarca la solicitud del presupuesto va encaminada precisamente a ir eliminando las cuotas y a obtener más presupuesto tanto de las federación como del estado.
Sin embargo, confió en que en el mes de noviembre de este año cuando presente su anteproyecto de presupuesto sea avalado y autorizado para poder destinar ese recurso para la adquisición de equipo de cómputo, ya que la pandemia coloco a la UAT en una situación complicada y ha sido difícil adquirir computadoras.
“No podemos equipar con tecnología a la universidad, porque no tenemos presupuesto”, por lo que confió en que en el mes de noviembre el consejo universitario y las áreas encargadas de presupuestar el gasto del próximo año sea positivo.
De ahí que confío en la buena relación con el gobierno del Estado y la LXIV Legislatura pero también de la intervención a nivel nacional para que respalden su presupuesto.
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